Cuando uno escucha la palabra streaming lo relaciona automáticamente con plataformas que emiten series y películas, pero el concepto de streaming va más allá.

En teoría, el streaming es un medio de una solo vía que utiliza el internet para transmitir material multimedia en vivo o en diferido, con la particularidad que el contenido no se descarga en el dispositivo receptor si no utiliza buffers de datos que acumulan partes de la transmisión que se va renovando conforme el contenido ya ha sido visto.

Para que nuestra transmisión se realice tanto para audio como para video, debe pasar primero por un proceso de codificación, luego debe alojarse en un servidor o en varios servidores dependiendo del alcance que queramos tener (local, regional, mundial) para así disminuir los efectos de la latencia y por último se concede el acceso a los usuarios en los diferentes dispositivos por medio de una plataforma web o aplicación móvil.

Hoy en día el streaming se ha popularizado y está siendo incluido dentro de las estrategias de contenido de las marcas, pues el video tiene un mayor nivel de impacto y seamos realistas las generaciones más jóvenes tienden menos a la lectura. Adicionalmente el avance tecnológico en varios frentes como, la conectividad (con mayor penetración de mercado y velocidades más rápidas), el rápido desarrollo de los dispositivos móviles y la aparición de diferentes plataformas que han democratizado el acceso a estos servicios han acelerado su masificación.

Fue la radio quien fue la pionera del streaming a mediados de los 90, cuando probamente era aún difícil la difusión de contenidos multimedia debido a las limitaciones relacionadas al ancho de banda del internet y a la penetración en la cobertura del mismo. Existían entonces portales que agrupaban diferentes estaciones de varias latitudes, hoy es normal poder acceder desde las páginas web de cada emisora a la transmisión en vivo.

Hoy en día resaltan plataformas como Twitch (que pertenece a Amazon) que se ha convertido en la preferida para realizar streamings en vivo sobre todo por gamers, dj´s, esports, podcasts entre otros. Las grandes redes sociales no se han quedado atrás y empresas como Facebook, Instagram y Youtube también ofrecen esta posibilidad. Al igual que como el fenómeno de “youtoubers” ahora se habla del fenómeno de “streamers”.

En cuanto a series y películas si bien Netflix es la marca más identificada mientras que en el campo musical Spotify es el referente.
Pero no es suficiente tener el medio o plataforma para difundir nuestro stream, también es necesario generar y mantener contenido con un nivel de calidad en la producción, la realidad es que el público es muy exigente.

Así que para un buen stream necesitamos implementar una serie de equipos audiovisuales (cámaras, iluminación, audio) y software y hardware que nos ayuden a presentarlo de la mejor manera, esto requiere de una curva de aprendizaje y una inversión importante en infraestructura. Es una actividad que se ha profesionalizado a una gran velocidad.

Los eventos no son ajenos al stream y ayudan a ampliar el alcance llegando a un público virtual, si somos organizadores de una feria, una conferencia, un lanzamiento de producto entre otros utilizar el streaming nos acerca más a nuestro público y se convierte en un nuevo canal de comunicación. En el mercado de la capacitación y educación, también se ha popularizado con los webinars.

Si está evaluando implementar el streaming como parte de la estrategia de comunicación de su empresa, en Plataforma contamos con el conocimiento, la tecnología y la experiencia para ayudarlo a que su stream cuente con una presentación profesional y no requiera distraerse de las actividades core de su negocio.

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